Etiquetas
Afecto, Amor, Camino, Cariño, Cursilería, Dulcinea, Hidalgo, Inspiración, Mascara, Musa, Palabras, Pereza, Princesa, Principe azul, Ridículo, Sentimientos, Tu, Tu y yo
Eras él, TU, ese al que yo creía conocer, ese que se burlaba de la cursilería y las muestras de afecto, que le daba pereza responder a las palabras cariñosas que yo le prodigaba, que me hizo sentir tonta, ridícula por explicarle a detalle porque le amaba tanto. Y sin embargo, así era, te amaba y te aceptaba porque así eras TU, esa era tu naturaleza.
Y entonces te quitaste la mascara, o me quitaron la venda de los ojos: al beso de otra princesa te convertiste en el príncipe azul, ingenioso hidalgo dispuesto a vencer gigantes por tu amada Dulcinea.
Pero ESE hombre para mi no existe. Para mi solo esta el otro, ese hombre frío, duro, insensible, incapaz de expresar sentimientos o de decir palabras de amor. ¿O es que acaso las has gastado ya todas? ¿O simplemente no soy yo tu inspiración?
Solo quería ser tu musa, pero en el camino me perdí…
con tantos referentes, con tantas veces que fue una musa, por qué no habría de ser la mía, y lo confieso eres tu mi inspiración y no te pierdas más en el camino
Con tus palabras me guío así que no te quedes en silencio…
intentaré no ser silencio aunque no creo ser un buen faro…